Lodges en Las Terrenas

Una experiencia inolvidable, estamos 100% satisfechos. Desde el día en que reservas todo es muy fácil, nosotros hicimos el pago previo desde España para no tener que llevar tanto efectivo, también puedes pagar con tarjeta sin problema. La casa en la que nos alojamos tiene 3 habitaciones cada una privada con su lavabo, ventilador, y nevera. En la parte que se comparte hay sofás, hamacas y una nevera más grande por si necesitas guardar tus bebidas, y un balcón inmenso. A la llegada nos impresionó absolutamente todo para bien, excepto la super cuesta para llegar al lugar (impresiona cuando subes con el coche, un poco difícil la subida) la vegetación, la tranquilidad, el sonido de los animales, la piscina, las vistas, las estrellas por la noche (detente un rato a mirarlas porque son impresionantes), el atardecer, la gente muy amable. Jhon fue todo un encanto, un hombre con mucha historia que contar, amable y agradable. Y Sandra!!! Increíble el equipo que llevan las comidas, unos desayunos guaooooo super ricos, y tuvimos el placer de disfrutar de las cenas y qué maravilla!!!! El guacamole de mariscos, el ceviche, los cócteles…todo. El último día teníamos que salir muy pronto porque teníamos excursión y sin ninguna duda nos preparó el desayuno antes de la hora (lo hablamos con ella la noche anterior), siempre con una sonrisa. Todo es a la carta, incluso el desayuno, cocinan especialmente para ti y eso es un plus. Quisimos coger dos noches más pero no conseguimos anular la reserva que teníamos para los días siguientes así que nos quedamos con la espinita de estar más días. Sin duda alguna volveremos si se nos presenta la ocasión. Recomiendo llevarte repelente y un adaptador para los mosquitos ya que estás en plena vegetación y sin duda aparecerán.

Hospitalidad, comodidades, cenas

La desconexion